Al llegar al aeropuerto, serás recibido y trasladado a tu alojamiento.

El resto del día queda libre para aclimatarte y disfrutar de la tranquilidad del entorno ártico.

Es el momento perfecto para dar un primer paseo por los alrededores, respirar el aire puro de Laponia y empezar a impregnarte del ambiente invernal que caracteriza esta región. Una introducción pausada antes de sumergirte en la magia de los próximos días.

Un día lleno de espíritu navideño y paisajes nevados. Comenzarás visitando la Aldea de Papá Noel, un lugar donde la fantasía cobra vida: conocerás a Papá Noel en persona, recorrerás su oficina de correos y podrás enviar tu carta con el sello oficial del Polo Norte. La experiencia es inolvidable, tanto para adultos como para niños, y permite vivir la ilusión de estar en un auténtico mundo navideño.

Después, cruzarás el Círculo Polar Ártico, un punto simbólico que marca la entrada al Ártico. Aquí podrás contemplar vistas impresionantes de los paisajes helados, sentir la emoción de estar en el límite del norte del planeta y capturar momentos únicos frente a la nieve y el hielo.

Vive una aventura emocionante con un safari en trineo de huskies, donde los perros árticos te llevarán a través de bosques nevados y paisajes mágicos. Aprenderás sobre estos animales, su entrenamiento y la vida en la nieve, mientras disfrutas de la velocidad y la adrenalina de deslizarte entre la nieve virgen.

Hoy descubrirás la serenidad de la naturaleza ártica en un safari con renos. Visitarás una granja tradicional donde conocerás estos animales tan emblemáticos de Laponia, su cuidado y su importancia en la cultura local.

Disfrutarás de un paseo en trineo tirado por renos, deslizándote suavemente entre bosques y senderos nevados, conectando con la calma y la magia del invierno ártico en un entorno único e inolvidable.

Adéntrate en el corazón del Ártico en el Parque Ranua, donde la fauna del norte se muestra en todo su esplendor. Aquí podrás observar osos polares, linces, zorros árticos, alces y muchas otras especies en un entorno natural rodeado de nieve y bosques.

Opcionalmente, puedes completar el día con experiencias adicionales como paseos en moto de nieve, pesca en hielo o una estancia en el Arctic SnowHotel, sumando aventura a tu viaje.

En tu último día, después del desayuno, serás trasladado desde tu alojamiento al aeropuerto para iniciar el vuelo de regreso.

Es el momento de despedirse de los paisajes helados, los renos y la magia del Ártico, llevando contigo recuerdos inolvidables y la experiencia única de haber vivido Laponia en pleno invierno.